Te enseño mi vuelo para equivocar tu rumbo. Sígueme.

Mi foto
Licenciado en Medicina y Cirugía. Frustrado Alquimista. Probable Metafísico. El que mejor canta los fandangos muy malamente del mundo. Ronco a compás de Martinete.

Ojos cerrados

Cerrar los ojos es a veces vivir la realidad. Es abandonarnos  a nosotros mismos para que nuestro Yo interior - La Verdad- se convierta en protagonista de la película de nuestra vida. 
Yo no solo cierro los ojos para no ver, sino para Ver... para verte.
En la soledad de la no luz de mis ojos cerrados puedo iluminarlo todo. Tengo millones de kilovatios de potencia de energía lumínica que alumbran cada centímetro de tu piel. Cada poro de tu cuerpo. Cada arruga de tu cara. Cada peca de tu cuerpo. Cada rincón de tu alma. Cada duda de tu corazón. Cada ansiedad que te atormenta. Cada suspiro. Cada lágrima no derramada. Cada deseo escondido entre tus sábanas.
Te veo.
Con los ojos cerrados.
Y sigo durmiendo solo entre grandes almohadas que van dejando huella en mi piel. Me dejan el asombro del dibujo de los bordados como arrugas de plastilina que me descubro grabado en mi piel por la mañanas.
Y dejo mi sudor y mi olor a hombre solo guardado entre las sábanas blancas.
Como un tesoro.
Para ti.